POR SUS HECHOS ....

Dice la Biblia, "por sus hechos los conoceréis", haciendo referencia que se pueden decir muchas cosas; pero lo que en realidad vale es la acción.
Esto de la metropolización de Cochabamba es realmente incomprensible por varios factores: primero, se supone que vivimos un gobierno de izquierda y, es más, muchas veces enfrentado a la propia historia y con denuestos como "karas" y otros epítetos que tratan de desconocer nuestro pasado colonial y promover, dizque, un proceso de descolonización; pero es precisamente la metrópoli el signo más evidente de esa colonización que no sólo mantuvo nuestros pueblos en el subdesarrollo sino en la discriminación; segundo, según las leyes se puede intentar la formación de mancomunidades que son completamente diferentes a la metrópoli porque no suponen un poder central omnímodo, discriminador y, si se quiere, urbano en detrimento del agro.
No importa qué concepto se quiera utilizar en lo de la metropolización; no coincide ni con la lengua, ni con la historia ni con la política y aunque habría de esperar que no sea más que el resultado de la ignorancia o poca preparación de quienes redactaron el malhadado instrumento, todavía se puede revisar si es que verdaderamente hay un proceso renovador, de cambio y no de vuelta a los procesos donde simplemente se cambia el amo.
Se puede leer la historia de la Argentina, el Brasil, Bolivia o cualquiera de las naciones latinoamericanas para comprender que la metrópoli nos encadenó a la colonia, al subdesarrollo, incluso después de haber conquistado la independencia respecto a España; es pues difícil entender que volvamos a las andadas con sofismas, más que argumentos, sobre obras que ya no pueden ser eminentemente localistas sino tener en cuenta un panorama más extenso pero que tampoco excusan la existencia de un gobierno metropolitano por muy "indígena-originario-campesino" que aparezca porque los hechos superan los dichos y la demagogia.
Al parecer a lo que vamos  es a la liquidación del agro, a la expansión siniestra de la "mancha urbana" porque analizando las obras de lo alcaldes de los últimos tiempos aquí y allá, no hay argumentos para explicar un crecimiento de la comuna como tal sino de la urbanistería como sofisma y distractivo.
La metropolización, cualquiera que sea el significado que se le quiere dar, no es más que la piedra libre para los monos con navaja que han estado asolando nuestras burocracias ediles, departamentales o nacionales y descubre la verdadera cara de la "izquierda".