Aunque habría que decir: lamentablemente, hay más; lo cierto es que las repercusiones de lo ocurrido al avión en que se trasladaba el Presidente boliviano, desde Moscú a la patria, parece apenas haber empezado.
Y se están dando situaciones curiosas, por llamarlas de algún modo, porque, por ejemplo, en la asamblea departamental de "la llajta" un representante del MSM (movimiento sin miedo) ha transformado su sigla en: Movimiento sin mollera, porque su aseveración que "Evo no es Bolivia" no sólo es producto de su ignorancia sobre la CPE sino que muestra un grado alto de rencor y consiguiente discriminación o miedo.
Lo mismo ha sucedido con otros que atribuyen el origen del "incidente" a la bronca que le tendría Morales a los EEUU; sin querer darse por enterados no sólo de las relaciones de sumisión que exige el Norte al Sur sino del estado de espionaje mundial que se está revelando a través de personas que se han cansado de tanta estulticia o han adquirido conciencia.
Pero lo que más sobresale entre los majaderos que se hacen llamar de oposición, no sólo es que caen en lo mismo que critican al oficialismo, que también tiene sus bemoles, sino que no están mostrando la inteligencia y capacidad con que debieran disputar ideológicamente.
Aunque en un ambiente donde los medios de comunicación no informan sino todo lo contrario es lógico que exista ignorancia respecto a tratados internacionales y relaciones diplomáticas, no deja de ser sorprendente que opositores y oficialistas salgan con demagogia más que argumentos y, en lugar de contribuir y dar una buena imagen, hagan precisamente lo que menos esperan los bolivianos que todavía tienen esperanza en el sentido común y la sabiduría.
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