¿GOBERNANTES?

Las crecientes protestas en Europa, la condición de los gobernantes latinoamericanos de las últimas décadas, los enfrentamientos tribales en África y hasta la insurgencia de nuevos líderes económicos en Asia, está poniendo de manifiesto y reiterando que los gobernantes de nuestros países, no son tales sino simples intermediarios.
Porque no sólo que la crisis económica mundial y sus "soluciones" apuntan a beneficiar más a unas cuantas personas que al pueblo sino que permanentemente se ha mantenido el ejercicio de la soberanía en el limbo; sea entre los gobiernos despóticos como "democráticos". Lo que no solo ha condicionado que la pobreza extrema se mantenga como un lastre permanente sino que surja una clase media, o una media clase, como dicen otros, que servía más que como una opción de mejorar algo como un amortiguador para enfrentar los problemas que crean los gobiernos intermediarios al interés del vil metal.
La supuesta polaridad entre gobiernos de izquierda y derecha, no ha hecho otra cosa que disfrazar el mismo mal: el materialismo, pues tanto el fracaso del neoliberalismo como del comunismo marxista no son más que facetas de ese gobierno inescrupuloso, avaricioso, soberbio, que se mantiene entre sombras, haciéndonos creer que gozamos de derechos y deberes, mientras no salgamos de los esquemas de la explotación del hombre por el hombre.
E, infelizmente, las cosas no tienen  cara de cambiar, al menos inmediatamente, si hacemos caso a los nuevos y persistentes intentos de crear nuevos focos bélicos, como se viene haciendo con la amenaza judía a los árabes o lo mismo hacia los iraníes; porque se comprueba una y otra vez, que los gobiernos no sirven a sus pueblos sino a los intereses del lobo, como decía Hobbes.