ALARMANTE CAMPAÑA

Si ya ha empezado la campaña electoral para las siguientes elecciones, del 2015, lo único que podemos decir es que muestra más bien unas facetas alarmantes que esperanzadoras. Porque aparte de no ver en el panorama de la politiquería ningún candidato con posibilidades ciertas, algunos medios de comunicación que responden a intereses empresariales, por decir algo, se están dando a la tarea de lanzar globos de ensayo y resurrecciones forzadas entre miembros de la extinta "clase política"; de ahí que estén desempolvando a personajillos de triste recuerdo confiados, quizá, en que como dice el dicho el pueblo no tiene memoria. Puede que sea así; pero hay algunos de ese pueblo que sí lo tienen y no va a ser muy fácil reponer esos actores del teatro de la dependencia-corrupción-impunidad, que hemos soportado y seguimos soportando.
Incluso así, es preocupante el ambiente en que vivimos porque la llamada oposición lo único que hace, hasta el momento, es desgarrarse las vestiduras por todo y por nada; fomentar la impunidad creyendo salir en defensa de la democracia y de sujetos perseguidos por delitos comunes y públicos y hundirse en su propio estiércol por falta de ideas.
Del oficialismo casi hay que decir lo mismo; tampoco hay una renovación del liderazgo y, lo peor, son las disquisiciones de café antiguo del Vice que cree que todavía el marxismo es una alternativa cuando ya la historia nos ha mostrado su vinculación con el más negro materialismo de la derecha. Por lo demás, no estamos para especulaciones ni filosóficas ni politiqueras cuando la situación es de gran responsabilidad porque habrá que hacer frente a la crisis mundial, cada vez más inevitable, y que requiere no sólo de una mente fría y bien informada sino también de una buena lectura de la realidad.
Por estos y otros factores la campaña electoral que se quiere inaugurar con grandes aspavientos, tiene todos los colores alarmantes de la irresponsabilidad porque no se está haciendo una correcta lectura de la realidad, porque no se tiene la información suficiente sobre las opciones del futuro y porque la preparación de nuestros "políticos" sigue siendo lamentable en uno y otro lado del espectro y de las tendencias. Y, como si fuera poco, continúan las tendencias separatistas y anarquizantes en manos de "cívicos" y otras yerbas.
Como aún faltan varios años quizá sea más aconsejable que se dediquen a trabajar, así sea haciendo adobes que meterse en camisa de once varas o locuras de recomendación para el siquiátrico de Sucre que, siendo la capital, no sólo tiene palacios sino también instituciones de tratamiento conveniente para quienes no quieren ver la actualidad.