¿RELACIONES DIPLOMÁTICAS?

Muchos de nosotros nos engañamos cuando pensamos que los gobernantes de los "Estados fallidos", como dice el eufemismo para referirse a los explotados, tienen relaciones diplomáticas con otros del mundo. La verdad es que no es así, si alguna relación existe sigue siendo del modo colonial, entre un explotador y un explotado, entre el que manda y el que obedece o, finalmente, entre el que disfruta la riqueza que el otro provee.
Por eso es que nuestras naciones siguen siendo cotos de caza; donde, por ejemplo, se invierten algunos miles de dólares para llevarse millones de ganancia, es lo que ha estado sucediendo con la empresa transnacional que administraba los aeropuertos bolivianos que después de obtener la concesión por menos de tres decenas de miles de los verdes, se ha estado llevando millones de ganancias y no ha cumplido ni pensaba cumplir, las mejoras y otras inversiones que debía hacer. Que no es cierto; pues la historia latinoamericana es un rosario de pruebas donde se han ensayado diversos tipos de estafa, desde adjudicar la construcción de tractores a los que no producen ni tornillos siquiera de acero, hasta la declaración de reserva de esto o aquello, mientras se explota su riqueza clandestinamente o se la mantiene como garantía de un futuro suministro para el "inversor". No hay equidad en las relaciones "diplomáticas" y peor todavía en las comerciales; pero siempre hay ignorantes defensores de los explotadores y que, a veces, también se llaman asesores como analizamos ayer, cuando cometimos el error, casi consciente, de decir que el aeropuerto Juan Mendoza era Pabón; la rectificación está hecha y esperemos que siga llamándose como se llamaba el primer piloto boliviano y gran partícipe en la contienda del Chaco.