martes, 3 de enero de 2012

INFORMES Y BALANCES

Algunos medios todavía han tratado de presentar sus balances e informes, al estilo antiguo, y aunque los mismos son como las estadísticas, dependen de quién los manipula, no hay duda que son siempre insuficientes y sesgados.
Hablar, por ejemplo, de la violencia es hacerse el harakiri porque al parecer no hay respuesta para alcanzar lo contrario, es decir, la paz. El sólo hecho de tener una amenaza pendiente como es la de iniciar la invasión a Irán es demostrativo de cómo se maneja el mundo: a través del miedo y de la prepotencia. No hay una cultura de la paz, por mucho que muchos se afanan en decirlo, propugnarlo o, aunque sea, manejarlo demagógicamente; es una tarea que la humanidad se niega a cumplir porque no responde a sí misma sino a intereses subalternos que se manejan desde la oscuridad.
Pero las cosas si bien pueden cambiar, no se puede tolerar que sea para la autodestrucción. Ya no son los tiempos de antes donde las armas tenían un carácter reducido de mortandad; hoy una sola bomba puede dar cuenta de gran parte de la humanidad en pocos días y acabar con toda ella si hay respuesta desordenada y simplemente hormonal.
Y todo esto no se dice ni en los balances ni en los augurios; los más se dedican a hacer lo suyo y ven el destino del planeta como algo que no está dentro de sus preocupaciones, a no ser, demagógica o sofísticamente como manejan la cuestión algunas organizaciones no gubernamentales que más que eso son nuevas fuentes de trabajo para unos cuantos que hacen de la solidaridad o la concientización, otro negocio del materialismo y del consumismo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario